Se sumerge y abre los ojos,
parece que dentro del agua también duele,
el mesías multiplicó los planes y no nos dio tiempo a hacer ninguno,
pintamos finales felices y no hubo final,
amamos en un vals y morimos en un tango,
llenamos el bidé de lagrimas y leímos entre rayas,
nadie supo traducir nuestros silencios,
ninguno quiso convertirlos en palabras
medimos el infinito en ganas de perdernos.
Nos perdimos.
Parece que dentro del agua también duele.
me gusta mucho... te sigo!
ResponderEliminarvienes a www.marencalma-adriana.blogspot.com?
abrazo!