Hablo de ella. Hablo de cambiar a Stendhal por su nombre en el síndrome, de cómo alguien se convierte en motivo, acción y la fusión de ambos, de cómo el segundero tiembla cada vez que da un paso si ella no está cerca, de cómo conjugar su sonrisa en gerundio y decir "no" cruzando los dedos. Hablo de joder el velocímetro de su pecho, de revolucionar los horarios y olvidar el sueño por los sueños, de hacer el amor y que el amor nos haga estar así, de matar al ocho para tumbarlo, de vivir entre puntos suspensivos y olvidar los de sutura.
No hablo de "para siempre", hablo de mañana cada día y del "Continuará" al final de cada episodio, del te odio reventando polígrafos y de los bolígrafos reventados por el sobreuso. No hablo de hacer planes, hablo de planear juntos a ras de mar y nadar juntos en el río a carcajadas, sumergirse en el amar y poder abrir los ojos para verla, de tener vértigo por la altura que estamos cogiendo y olvidar el paracaídas y las huidas para nada.
Hablo de que quizá esta vez no haya que huir y de que huir significaría ir a buscarte* como dijo aquella. Hablo de que el otoño no es tan malo y que el invierno será mejor, hablo de nieve en el mar de Coruña y sueños de hace meses cumplidos en la arena. De tácticas y estrategias, de terapias de choque para perder el miedo al te quiero, de hacerme ser incoherente con mi yo de anteayer que ya no creía en todo esto, de que sea la margarita la que me pregunte a mí y que yo responda que no, cruzando los dedos.
No hablo de "para siempre", hablo de mañana cada día y del "Continuará" al final de cada episodio, del te odio reventando polígrafos y de los bolígrafos reventados por el sobreuso. No hablo de hacer planes, hablo de planear juntos a ras de mar y nadar juntos en el río a carcajadas, sumergirse en el amar y poder abrir los ojos para verla, de tener vértigo por la altura que estamos cogiendo y olvidar el paracaídas y las huidas para nada.
Hablo de que quizá esta vez no haya que huir y de que huir significaría ir a buscarte* como dijo aquella. Hablo de que el otoño no es tan malo y que el invierno será mejor, hablo de nieve en el mar de Coruña y sueños de hace meses cumplidos en la arena. De tácticas y estrategias, de terapias de choque para perder el miedo al te quiero, de hacerme ser incoherente con mi yo de anteayer que ya no creía en todo esto, de que sea la margarita la que me pregunte a mí y que yo responda que no, cruzando los dedos.
Si es lo quiero creer el, te a condicionado todo el texto, si no ya sabes...
ResponderEliminarEnhorabuena. Bellísimo, gracias.
ResponderEliminarMe ha encantado!
ResponderEliminarEl continuará que difícil es cuando te das cuenta de que se ha terminado pero deseas que continue....
ResponderEliminarMe encanta, me ecnanta
Soy fiel seguidora tuya
Marta
Qué grande.
ResponderEliminarCómo me gusta, y qué honor.
Siempre plisplas al salir de aquí, señor
:)
Me das miedo. En el buen sentido de la expresión.
ResponderEliminarMe flipa. No paro de leerlo, y los pelos de punta. Vértigo, vaya.
Cada día te superas. No dejes esto NUNCA. Nos harías un favor a tus lectores, al menos a mí.
Ya ves.
Es obvio que tienes un don para escribir pero hay veces que el propio lenguaje se vuelve en tu contra...Con textos como este ya me dirás quien encuentra palabras para definirlo.
ResponderEliminar"No hablo de "para siempre" hablo de mañana, cada día y continuará" estos son los de verdad. Me ha gustado mucho :)
ResponderEliminarTe quiero, marmota.
ResponderEliminarBrutal. Qué bien se habla de amor cuando se está enamorado. Me pongo verde de envidia.
ResponderEliminarIncreíble.
ResponderEliminarDios, escribes genial. Me encanta, no encuentro palabras. Ojalá algún día llegué a expresarme como tú. GRACIAS
ResponderEliminarOjalá algún día vengas. Y cumplamos todos esos sueños.
ResponderEliminarTe quiero. Mucho.
es de hace un monton pero llevo media mañana leyendo tu blog a escondidas, porque tendría que estar haciendo otras cosas.
ResponderEliminarAplaudo en silencio con todos mis sentidos. Las palabras se me quedan cortas
sencillamente SUBLIME.
ResponderEliminarQué genialidad.
ResponderEliminarMe encantó.
¿Para cuándo la película?
ResponderEliminarTienes un don.
Shsfjkhsdfgk. Nada más que decir.
ResponderEliminarMuy bonito y muy bien escrito, bravo
ResponderEliminar'Ven, que te voy a hablar en morse.'
ResponderEliminarMe ha gustado, mucho.
Un saludo, señorito.